Es la expresión máxima de la
vida humana en lo que refiere a la libertad, rebeldía, ideas, frescura,
transformación de cultura, entre otros. El siglo XX se caracterizó por ser el
periodo en el cual la civilización experimentó grandes acontecimientos, algunos
apocalípticos, como la I y II Guerra Mundial. Otros gloriosos, como la llegada
del hombre a la Luna – escepticismo que aún persiste – y el desarrollo de las
comunicaciones.
Pero la juventud, fue aquella que surgió espontáneamente de las revoluciones y artes, donde el humano consciente y con capacidad de razonamiento más avanzada en comparación de un niño, tuvo el valor de tomar las riendas de sublevación y se reveló ante el sistema social impartido en cada nación, que poco comprendía a los jóvenes, aquellos que no tenían respuestas a sus complejos.
Patentándose desde luego, en aquel filme Rebelde sin causa cuyo protagonista James Dean – ícono de la juventud del siglo XX – simboliza la adolescencia de los 50’ en los Estados Unidos, flor del capitalismo y consumismo, modelo copiado a lo largo de las décadas siguientes por las naciones occidentales. Iconos como Chuck Berry,Elvis Presley y Marilyn Monroe catapultaron un dilema llamado juventud.
Pero la juventud, fue aquella que surgió espontáneamente de las revoluciones y artes, donde el humano consciente y con capacidad de razonamiento más avanzada en comparación de un niño, tuvo el valor de tomar las riendas de sublevación y se reveló ante el sistema social impartido en cada nación, que poco comprendía a los jóvenes, aquellos que no tenían respuestas a sus complejos.
Patentándose desde luego, en aquel filme Rebelde sin causa cuyo protagonista James Dean – ícono de la juventud del siglo XX – simboliza la adolescencia de los 50’ en los Estados Unidos, flor del capitalismo y consumismo, modelo copiado a lo largo de las décadas siguientes por las naciones occidentales. Iconos como Chuck Berry,Elvis Presley y Marilyn Monroe catapultaron un dilema llamado juventud.
Poster Rebelde sin causa |
Rebelde
sin causa es una
película estadounidense de 1955,
dirigida por Nicholas Ray y protagonizada por James Dean, Natalie Wood, Sal Mineo,Jim Backus, Ann Doran y Corey
Allen en
los papeles principales. En el cual Jimmy Stark (James Dean), estudiante
de instituto, es un chico particularmente difícil: confuso y desorientado, se
ve frecuentemente envuelto en peleas y conflictos, a consecuencia de los cuales
su familia, en la cual es el hijo único, se ve obligada a un permanente
peregrinaje de una ciudad a otra. Llegado a Los Ángeles, también encontrará
nuevos sentimientos hasta entonces desconocidos, el amor de Judy (Natalie
Wood), y la amistad admirativa de ‘Platón’ Crawford (Sal Mineo), un
muchacho aún más joven que él. No tarda en sostener su enésimo enfrentamiento,
aunque, en esta ocasión, culminando en consecuencias terribles.
Por
tanto, dicha obra insignia del séptimo arte dio inicio a algo que la sociedad
de consumo se inventó o transformo en tiempo posterior, puntada inicial a una
manifestación novedosa del proceso natural de la evolución darwinista, el cual
en tiempos ajenos a la modernidad, se basaba en nacer, crecer, reproducirse y
morir.
Dean
también marco un hito en la historia moderna, debido a que fallece a los 27
años – edad curiosamente mítica – en un accidente automovilístico. Sin embargo,
también incrusto lemas que invocan a vivir la juventud plena, con sueños y excesos. A un inicio de
diversión y juerga, pero con desenlaces fatales. A mi juicio, dos frases que
sellaron el inicio de la juventud, persistentes hoy día. “sueña como si fueses a vivir para siempre, vive como si fueras a morir
hoy” y “hay que vivir deprisa, la
muerte llega muy pronto”. He aquí, el primer filosofo de la juventud.
Jimi Hendrix |
Llegan
los 60’ y con ella, la el éxtasis de la liberación sexual, apatía al racismo, a
la guerra, estallidos de revolución social, entre otros. Provenientes de la
juventud, rebelde y apasionada por el cambio social, visionado desde las clases
sociales menos favorecidas, fervientes en vivir en paz y armonía. La juventud,
se inventó el rock n’ roll. The Beatles, Woodstock y la liberación sexual son
primogénitos de los primeros pasos de la juventud, estos pioneros de la
invasión británica desataron en Occidente un fervor de idolatría a los movimientos
hippies, al cine francés, la revolución cubana, la aparición de comunidades
LGBTI y el NO rotundo a la guerra de Vietnam. Aparecen ‘filósofos’ tales como
Luther King, Jimmy Hendrix, Jim Morrison y John F. Kennedy, induciendo
principios que iban en contra de todas las visiones y luchaba contra todo lo
establecidos, iconos que no perduraron hasta la siguiente década. Por otro
lado, la aparición de instrumentos apocalípticos como las drogas LSD, heroína, marihuana,
entre otros, que sólo han servido para ir en detrimento de los jóvenes que no
hallan solución alguna a sus vivencias. Dos contrastes – revolución y drogas -
que se plasmaron como estatuas en aquel lugar del tiempo que muchos
contemporáneos denominan como la década de los cambios. La revolución de mayo 68 en Francia, nos reveló todo lo anterior.
John Lennon |
Tras la
muerte de Hendrix, Morrison, el desenlace de la Guerra de Vietnam y la
separación de The Beatles, la década de los cambios - los sesenta – queda atrás, sus ideales
perduran pero sus insignias desaparecen de la faz de la tierra. Los primeros
pasos de la tecnología contemporánea como el nacimiento de Apple y la creación
del Walkman, las pandillas juveniles abordadas desde la visión magnánima y
creativa de Stanley Kubrick a través de su fruta ácida llamada La Naranja Mecánica, el elíxir de la
ficción con Star Wars, en la música
Led Zeppelin y el boxeo como
protagonista con Rocky dentro de las
experimentaciones del séptimo arte. Por otro lado, John Lennon se convirtió en
aquel símbolo de paz, que había sobrevivido de la década anterior y se dispuso
a recorrer el mundo en busca de la convivencia pacífica y armónica entre la
humanidad. Lastimosamente es asesinado en Nueva York a finales de 1980. El punk neoyorquino y británico también elevó su voz en esta década - The Ramones & The Clash.
Logo de MTV |
Sin
embargo, la década que para la juventud mostró dos caras de la moneda – a mi
juicio según lo investigado y testimonios de mi entorno – fueron los años 80.
La juventud dejaría de ser revolucionaria, a transformarse en un estilo chic –
mezclando glam y prestigio – donde la
música y el cine estuvieron en su máxima expresión artística como tal, los
videojuegos, el surgimiento del neoliberalismo, aparición del SIDA, la amenaza
latente de una guerra nuclear, la lucha de guerrillas en América Latina
continúa y la caída del muro de Berlín fulminarían al comunismo en toda Europa.
Una juventud que vivió descalabros – aparición del SIDA y amenaza nuclear –
mientras que por otro lado estuvo favorecida por la aparición de videojuegos y
poder adquisitiva. Como íconos Maradona, Lech Walesa, MTV, entre otros. La
libertad de la juventud se basó en el materialismo, apoyado en ideas
convencionales y consumistas, apartando a un lado el idealismo anárquico de las
décadas anteriores.
Kurt Cobain |
Ante eso,
llegaron los años 90. La caída de la URSS, La revolución informática – gracias tanto
al internet como Microsoft– , el boom de la telefonía móvil, la evolución de
los videojuegos – aparición del Super Nintendo junto al PlayStation - y MTV en
su máximo esplendor como las series de televisión, los jóvenes de aquellas épocas
se hartaron del consumismo y mostraban una visión futurista pésima. Lo cual les
valió la denominación de la generación X. La cual se basaba en un vacío de
valores y recordó aquellos principios anarquistas de Tolstoi y nihilistas de Nietzsche
a través del grunge, hardrock junto al rap y hip - hop. Hechos importantes
impulsados por jóvenes como la unificación de Alemania, el acuerdo de paz en
Irlanda del Norte, inclusive la llegada del Armagedón. Personajes como el
rockero Kurt Cobain – vocalista de Nirvana - , el asesinado rapero Tupac
Shakur, el piloto brasileño Ayrton Senna
y Mónica Lewinsky, asesora presidencial de Bill Clinton, fueron los destacados
personajes entre la juventud de aquella época. Fue una época que sirvió de transición
al siglo XXI.
Estudiantes chilenos en 2011 |
Ante estos
sucesos, la primera década del siglo XXI recopiló todas aquellas ideas que los
jóvenes en décadas anteriores dejaron como legado. Con el nacimiento de una
nueva revolución industrial, protocolo de Kioto, aparición de herramientas o
nuevas tecnologías en la información y comunicación – masificación del correo
electrónico y dispositivos de almacenamientos (USB) – convirtieron a los
jóvenes en ciudadanos digitales que tienen una residencia permanente en el
mundo del ciberespacio. Las diferentes corrientes ideológicas chocan también en
este mundo – creado por los humanos – con representaciones simbólicas como páginas
web, redes sociales, correo electrónicos, entre otros. Servirían como puntos de
encuentros de masividad de grupos desde
anarquistas pacíficos hasta conservadores radicales. El matrimonio de
homosexuales, la legitimidad de la comunidad de LGBT, la despenalización del
aborto y el uso de drogas – en especial la marihuana -, la pedofilia por parte
de líderes religiosos, el grito por una educación gratuita y de calidad – Chile
y Colombia - bastaron para que los jóvenes hasta nuestros días alzaran su voz,
y convirtieran como armas de poder la informática – liderada por Anonymous – a
través de convocatorias en redes sociales – el movimiento 15M y la Primavera
árabe dieron muestra de ello - para luchar en contra del sistema que lleva en
detrimento moral y económico a la civilización contemporánea.
De todo lo anterior, se
destaca como denominador común la rebeldía juvenil, ferviente en todas estas décadas
de cambios y revolución del sistema que se establece en el poder ya sea a
través de manipulación o sangre. El mundo sin la juventud, sería una cárcel sin
prisioneros inocente – consideración particular -. La frescura juvenil, siempre
generará polémica, estigmatización y exclusión por parte de grupos sociales que
se resisten al cambio, radicalizando los valores y no principios. El mundo
siempre estará en constante movimiento, quién no se acopla a los nuevos
cambios, muere en la vejez del tiempo.
Los jóvenes son los herederos del
tiempo. En Colombia, un gran genio llamado Jaime Garzón nos dejó como legado
sus pensamientos. “Si ustedes los jóvenes
no asumen la dirección de su propio país, nadie va a venir a salvárselos” y
concluyó esta opinión con la siguiente frase
“Es la fiebre de la juventud la que mantiene el
mundo a la temperatura normal” decía el escritor francés Georges Bernanos.
¡Larga vida a la juventud!